Normas para una buena entrevista laboral

Cuando se busca empleo debemos prepararnos de una forma adecuada para la entrevista, pues si nuestro trabajo soñado hay que causar una excelente primera impresión. No hay segundas oportunidades por lo que hay que tener en cuenta varios aspectos.

Por ejemplo, el currículo forma parte de nuestra primera impresión. El propósito de este es lograr una entrevista que nos pueda llevar a obtener un empleo. Por lo tanto, el currículo debe estar muy bien elaborado y ser lo suficientemente atractivo para que le concedan una entrevista.

Antes de enviar el currículo debemos tener en cuenta que es primordial definir los objetivos laborales y cuál es el tipo de empleo que desea conseguir. Pero no cerrarse en uno específicamente, sino tener en cuenta otras alternativas que puedan ayudar a ampliar su red de contactos, adquirir habilidades y encontrar una mejor oportunidad en el trabajo deseado.

Investigar juega un papel importante ya que si no tenemos la información básica de la empresa refleja una falta de interés por el puesto. También debemos cumplir con los requisitos, si la compañía cumple sus expectativas y el puesto al que vamos a aplicar. De igual manera identifique sus habilidades como las interpersonales, aprendizaje continuo, organización, conocimientos de informática… y que puede ofrecerle a la empresa para que se interese por usted.

“La puntualidad es la cortesía de los reyes”. No está bien visto llegar tarde a ningún lugar y menos a una entrevista de trabajo donde se está en juego un futuro empleo. Es una falta de educación y respeto. La entrevista se puede echar a perder por la impuntualidad ya que esto hace ver su grado de compromiso. Siempre es mejor llegar algunos minutos antes. Se puede esperar en cualquier lado, pero es mejor presentarse antes de la hora para mostrar su interés y puntualidad.

Por otro lado, no mentir con el contenido de su currículo. “La mentira tiene patas cortas” por lo que en el transcurso de la entrevista su mentira caerá por su propio peso. Existen diferentes maneras de sacar la verdad; los entrevistadores son expertos e investigan. Por eso no se moleste en si quiera hacerlo, es mejor ser sincero respecto a sus conocimientos, estudios y vida que pasar por la vergüenza de ser descubierto.  Esto lo deja automáticamente fuera del proceso de selección y lo perjudica para próximas búsquedas de empleo.

Normalmente se asiste a una entrevista de la manera más prolija, de acuerdo con la empresa o industria que se trate,  cuidando cada detalle de la  presentación personal porque esta proyecta al ser humano y su orden. Es el  reflejo del estado de ánimo, relaciones interpersonales, salud mental y física. Por lo que a simple vista los entrevistadores pueden hacerse una perspectiva de cómo es una persona. A su vez el cuerpo debe reflejar confianza y tranquilidad con una postura erguida y un tono de voz fuerte y convincente, demostrando seguridad.

Para finalizar hay que destacar que no se debe hablar demasiado ni criticar. No es aconsejable dar información que no es solicitada, pues simplemente al entrevistador no le interesa. Tampoco criticar el antiguo empleo, jefe y compañeros de trabajo. Esto generara desconfianza hacia el entrevistado y reflejara actitud negativa, deslealtad y falta de ética profesional.

Lo primordial es no desistir ni perder la convicción de encontrar el empleo deseado. Claramente esta, que son muchas más de las normas mencionadas que pueden ayudar a conseguir un trabajo. Así como hay diversos factores que  contribuyen  a una posible contratación, a veces puede ser hasta suerte, pero la oportunidad está ahí solo hay que ir a encontrarla.